El espacio de trabajo influye de manera directa en la productividad de una empresa. Cuando los empleados se sienten cómodos en el ambiente en el que laboral, se sienten más motivados para cumplir con lo que de ellos se espera de la mejor manera posible. El ambiente laboral, por lo tanto, tendrá un impacto directo en el éxito de tu empresa, así que debes hacer todo lo posible porque éste sea el óptimo.

Una buena forma de comenzar a formar un buen ambiente es a través de un espacio de trabajo óptimo. Es importante que cada empleado se sienta cómodo en su lugar, así que aquí te daremos una herramienta que puedes utilizar para conocer cuáles son las necesidades que tu empresa tiene en cuanto a inmobiliario.

Beneficios de contar con un espacio de trabajo óptimo

Al establecer un negocio, es vital dedicarle cierto tiempo a la selección de una oficina y la distribución y equipamiento de ésta, ya que tener un espacio de trabajo planificado específicamente para las necesidades de tus colaboradores traerá consigo enormes beneficios para el rendimiento y la productividad.

Se debe poner especial énfasis en crear ambientes bien distribuidos, con todos los recursos a tu alcance, el diseño correcto y el espacio suficiente para el desarrollo de cada empleado. Aspectos como el mobiliario, la decoración y la disposición de áreas comunes fomentan la creación de un clima laboral positivo, impulsando el desempeño general de la empresa.

El clima laboral dependerá también de factores como las medidas de seguridad implementadas en la oficina. Por lo tanto, debes verificar que ésta se encuentre equipada con elementos como sistemas contra incendios, cámaras de CCTV y vigilancia 24/7.

Pero, para poder lograr todo esto, primero deberás enfocarte en adquirir una oficina de un tamaño suficiente para realizar las labores cómodamente y sin ningún obstáculo.

Qué dimensiones debe tener tu oficina

Dependiendo del tamaño de tu empresa, el espacio de trabajo requerido será mayor o menor. A pesar de que cada empresa tiene requerimientos y funciones distintas que cumplir, existen medidas mínimas que deben considerarse por todo negocio al adquirir una oficina.

Según expertos, lo más recomendable es que cada empleado disponga de 14 m2, incluyendo un porcentaje de las áreas comunes. Para el trabajo individual, es decir, la zona de escritorio o lugar designado para cada empleado, se necesitarán al menos 3.5 m2. Debe tenerse en cuenta que un escritorio generalmente mide alrededor de 80 cm, por lo que el espacio asignado a cada empleado debe permitirle moverse cómodamente a su alrededor.

Si cuentas con una empresa de grandes magnitudes y un numeroso equipo de trabajo, quizás quieras considerar otro tipo de espacios más allá de los módulos individuales, como salas de juntas colectivas y privadas, mayores áreas de esparcimiento, comedores, estacionamientos, etcétera. Esto requerirá de una superficie incluso mayor.

Conclusión

Seguramente habrás pensado que la forma más rápida y práctica para conseguir un espacio de trabajo que cuente con las características arriba mencionadas y que además se ajuste a la perfección a las necesidades particulares de tu empresa es buscando en un edificio de oficinas. Y es por que realmente lo es. Al establecer tu negocio en un edificio encontrarás una gran variedad de opciones que se ajusten a lo que necesites, además de que contarás con espacios y servicios que, al tener una oficina particular y aislada, te sería sumamente costoso, por último, al estar en un edificio te desprendes de los problemas cotidianos que el mantenimiento de cualquier inmueble supone.